Después del último ocaso
Fui consciente de tu pérdida. Después del último ocaso.
Pertenecías al viento y al agua
y yo era tierra rojiza.
Hablablas lenguas extrañas
mientras las mías, sin artificios,
luchaban por imponerse
en tus raíces.
Yo era calor y poesía,
tú furia y tempestad.
Yo te hacía el amor
con mis ojos y mis manos,
tú me cogías y te derramabas en mi ser
sólo por pura necesidad.
Fui un invento tuyo
para saciar tu sed
y yo seguía mendigando
una caricia que contentase
las llagas que provocabas en mi vientre.
Fui pequeña, soñadora a pesar de todo.
Fui invierno cuando sólo quería
un verano que calentase mis pechos.
Fui oscuridad gracias a ti.
Ahora, después del último ocaso
ya no me perteneces.
Y no me importa.
Pertenecías al viento y al agua
y yo era tierra rojiza.
Hablablas lenguas extrañas
mientras las mías, sin artificios,
luchaban por imponerse
en tus raíces.
Yo era calor y poesía,
tú furia y tempestad.
Yo te hacía el amor
con mis ojos y mis manos,
tú me cogías y te derramabas en mi ser
sólo por pura necesidad.
Fui un invento tuyo
para saciar tu sed
y yo seguía mendigando
una caricia que contentase
las llagas que provocabas en mi vientre.
Fui pequeña, soñadora a pesar de todo.
Fui invierno cuando sólo quería
un verano que calentase mis pechos.
Fui oscuridad gracias a ti.
Ahora, después del último ocaso
ya no me perteneces.
Y no me importa.
poema de Mariola hermida: http://cinamomorosa-mariola.blogspot.com.es/
Moitas grazas Balbi pola túa xenerosidade. un biquiño moi grande.
ResponderEliminarFaltoume dicir que a muller con esa redondez da cara faiseme como coñecida, mira ti. Torna a mirada cansa,(non sei se polo para de cañas ou porque está sonmolenta). En calquera caso esa mirada trazada tan sutilmente que transmite tanto. biquiños.
Eliminar(publico o teu outro comentario deste xeito, non puden facelo dende o correo)
Ainda non seguindo ningún modelo en concreto os rasgos semellan as veces a xente coñecida, o noso subconscente vai rexistrando todo, e os rasgos de os rostros coido que incluso mais xa que neles aprendemos a leer os estados de ánimo.
Ese ollar canso, si é por causa do efecto das cañas ou porque ás bote de menos, quen sabe...:)
Gracias a ti, Mariola, o teu poema pareceume unha xoia, encantoume e fun a buscalo contando coa túa xenerosidade.
Bicos
Faltoume dicir que a muller con esa redondez da cara faiseme como coñecida, mira ti. Torna a mirada cansa,(non sei se polo para de cañas ou porque está sonmolenta). En calquera caso esa mirada trazada tan sutilmente que transmite tanto. biquiños.
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